jueves, 25 de octubre de 2007

Dejadme disfrutar el momento...

El final del Campeonato Mundial de Formula 1 de la Federación Internacional de Automovilismo no podía haber terminado de una forma más sorprendente, polémica, espectacular, merecida, justa...

Como siempre, tenemos cosas que analizar: por un lado está el merecidísimo triunfo de ¿quién? Sí, ése tipo llamado Kimi Raikkonen, el que no tenía aspiraciones al mundial, al que ya daban por acabado en mayo, al que según el mismo calvo de siempre "le faltaba algo que los campeones tienen". Pues bien, queridos míos, este tío es campeón de 2007. No ha sido Alonso, en lo que podría ser su tercer campeonato (me parece que te vas a quedar en dos, querido), ni Hamilton, pese a todas sus pretensiones y las de su equipo.


Y es que queridos amigo, no os podéis imaginar el placer que le provoca a uno el ver al máximo candidato a campeón siendo adelantado por todo Cristo, verlo en decimooctava posición, y ver que el otro (Alonso) tiene una auténtica cafetera de coche. Es maravilloso.

Creo que el ridículo de McLaren y todas esas historias ya se han encargado de manosearlas las gentes de mal vivir que escriben para la sección de Formula 1, así que no me voy a extender en ese tema. Lo que sí he hecho es una lista con los nombres de las personas que deberían retirarse de los alrededores de este noble deporte o por lo menos tomarse un año sabático para que se le bajen los humos. Sin ningún tipo de orden, tenemos:

- Sakon Yamamoto
- David Coulthard
- Fernando Alonso
- Antonio Lobato
- Jarno Trulli
- Ron Dennis
- Martin Withmarsh
- Giancarlo Fisichella
- Rubens Barrichello
- Víctor Seara
- Todos los espectadores que compran entradas en la grada N en Montmeló
- Norbert Haug
- Max Mosley
- Charlie Whiting
- Marco Canseco
- Miguel Sanz
- Joaquin Verdegay
- Julio Morales
- Gonzalo Serrano (simplemente para no tener que volver a oir "si parpadean se lo van a perder")

jueves, 18 de octubre de 2007

Los del "furbol"

Lo primero es lo primero: lo siento. Es curioso lo rápido que decae el ritmo de escritura en un blog cuando la gente no lo lee. Han pasado muchas, muchísmas cosas desde mi última entrada, allá por julio, pasado el Gran Premio de Europa. Contarlo todo llevaría líneas, líneas y más líneas. Simplemente me limito a escribir una evaluación personal de lo acontecido desde julio hasta octubre, que no ha sido poco.

Hemos sido testigos de lo que puede causar la manipulación mediática llevada al extremo. Antonio Lobato y sus malvados secuaces han defendido lo indefendible, intentando hacernos creer que Fernando Alonso es un santo caído del cielo y que él jamás en la vida rompería un plato, y muchísimo menos, usar datos confidenciales de un Ferrari F2007. Claro, toda esa pandilla de papanatas que va a animar a Alonso al Gran Premio de España de 2007... con la camiseta de Renault, se habrá creído toda esa ristra de barbaridades que los de la cinco han soltado. Yo siempre digo lo mismo con esta clase de peñas alonsistas: ya sé que en un domingo se aburren, pero si quieren matar el tiempo hasta las ocho de la tarde, cuando empieza el Atletico de Madrid - Getafe, váyanse al cine con sus esposas, jueguen con sus hijos en el parque, hagan un puzzle, pero no entretengan su valioso tiempo con deportes que ni siquiera les interesan, como del que hablamos en este foro. No derrochen sus 350 euros de entrada del Gran Premio de España para hacer en la grada N cualquier cosa menos ver una carrera de Formula 1. Es más barato comprar seis botellas de vodka, tres botellas de zumo, cinco tetra-briks de don simón y cuatro botellas de 2 litros de coca cola. Así pueden agarrar una castaña de mucho cuidado sin tener que poner en evidencia a España por enésima vez delante del resto de aficionados internacionales.

Luego claro, hay que oír a algunos decir sandeces del estilo de "la sanción contra "maclaren" fue injusta" o... "Alonso no gana porque "maclaren" favorece a Hamilton". Primero: ¡claro que la sanción a McLaren fue injusta! Deberían haber sido expulsados de los campeonatos de 2007 y 2008, cuando sólo les quitaron los puntos del campeonato de equipos (y no de constructores, a ver si controlamos las traducciones literales, señor Lobato). Segundo: Yo no he visto a Ron Dennis meterle óxido nitroso (que ahora este compuesto químico está muy de moda) al monoplaza de Hamilton, o pincharle las ruedas a Alonso. Que yo sepa las carreras se ganan en la pista, no en las ruedas de prensa. Pero a los medios españoles les encanta convertirlo todo en una telenovela. "¡Alonso y Dennis no se dirigen la palabra desde Hungría!": menuda bobada. Mientras pilotos como Vettel acaban cuartos con un Toro Rosso, a Marca sólo le preocupa las desavenencias en el romance del cabalero Ron Dennis y la bellísima Adriana Lewisa Hamilton, amor que es codiciado por la desgraciada Teresa Fernanda Alonso.

Pero qué le vamos a hacer, esto va a seguir así, hasta que los del "furbol" de los domingos decidan cumplir con sus votos nupciales en vez de ver por la tele un deporte que no tiene nada que ver con dar patadas y meter goles.

domingo, 22 de julio de 2007

El "buen ganador"

No creo necesario el comentar la espetacular carrera de la que hemos sido testigos, se supone que este blog es para gente que ve las carreras y sabe cómo han sido. Por el contrario, me gustaría hablar sobre la actitud de cierto piloto de "nuestra tierra" después de haber ganado el GP de Europa. El pollo, llamado Fernando Alonso Díaz se bajó de su monoplaza, y después de hacer las celebraciones de rigor sobre su coche, se dirigió a una cámara, pidiéndole que se acercara. El cámara enfocó a donde señalaba Alonso, un horadado en el través del bólido provocado por su colisión con Felipe Massa. A la vez que lo mostraba, Alonso mostraba clarísimos y provocadores gestos de desaprobación mientras que decía "así no se hace".

La gracia del español le sentó como una patada en los huevos al brasileño, que curiosamente estaba viendo la realización por televisión desde la sala de pesaje, la previa al escenario del podio. Cuando llegó Alonso, todos pensábamos que iba a ser lo típico: no saludarse. Sin embargo, se saludaron, se dieron la mano, y en vez de decirse "enhorabuena", estas fueron las lindezas que se dijeron:

M - A propósito, lo has hecho a propósito"

A - A propósito ha sido tu toque

M - ¡Anda ya! Vete a cagar. Ganas y te comportas así, gilipollas. Vences y te comportas así. Tienes que aprender

A - El que tiene que aprender eres tú... A tres vueltas y casi quedas quinto. Anda, ¡Qué lo has hecho bien!

M - Sí, sí. también lo hice a propósito en Barcelona. Aprende, aprende.

Yo creo, dejando al margen de que la culpa del toque fuera de Massa o de Alonso, que el asturiano ha hecho, en palabras de Massa una gilipollez y una ridiculez que no está a su altura ni como director de la Asociación de Pilotos, ni como piloto de la más alta categoría del automovilismo, ni como embajador de Unicef. Ha sido una tontería de niño pequeño, una rabieta estúpida de mal ganador. Si has ganado te alegras, pero no chinchas al que has adelantado porque su coche no iba bien en lluvia y que si no hubiese llovido habrías quedado de tercero (sí, tercero, porque recuerdo que Raikkonen salió de primero y Massa adelantó a Alonso en la primera curva). Massa tiene todo el derecho del mundo a llamarlo gilipollas, porque se lo ha ganado. Hoy Alonso, al margen de su victoria, ha caído muy bajo, bajísimo, mucho más bajo en mi opinión que cuando Zidane le pegó el cabezazo a Materazzi, porque Zidane había sido vilmente provocado, y fue expulsado mientras que Materazzi siguió en el juego. Alonso ha intentado humillar al brasileño sin ningún motivo de peso, y nadie lo ha reprimido, nadie lo ha expulsado, y nadie lo ha sancionado.

viernes, 13 de julio de 2007

McLaren no se salva del todo

Aunque Ferrari haya pactado la retirada de la denuncia judicial a McLaren por espionaje industrial, a cambio de 50000€ y la devolución de todos los documentos robados, la escudería alemana no se va a ir de rositas. La FIA, que más que "Federation Internationale du Automovilism", debería llamarse "Fastídiese el Inútil de Alonso", porque siempre, de alguna forma tienen que estar dándole el coñazo al asturiano; ha citado al equipo de Ron Dennis a rendir cuentas a un tribunal interno de la organización.

Aunque el asunto del espionaje industrial a lo mejor sólo les acarrea una sanción económica, el sabotaje a los coches de Massa y Raikkonen en el Gran Premio de Mónaco cometido por Nigel Stepney, técnico de Ferrari, sí puede salpicarles a los amigos de McLaren-Mercedes en toda la cara. La gracia le va a salir cara tanto al descerebrado de Stepney como a la escudería contraria, ya que echar polvos de talco en el depósto de gasolina antes de un Gran Premio no es ninguna tontería. Es posible incluso que la sanción por esta monada tenga consecuencias en los pilotos español y británico y su posición en el mundial.

Una cagada, vamos

Finalmente Winkelhock

Pues parece ser que ni Klien, ni Karthikeyan, ni Vallés, ni Doornbos: finalmente el piloto que va a ser compañero de Sutil será otro alemás, Markus Winkelhock, cuyo padre fue tambien piloto de Formula 1. Winkelhock fue hasta el momento compañero probador de Adrián Vallés en Spyker, y según la cabeza del equipo, el teutón cuenta con más experiencia con el monoplaza que el español. No obstante, está previsto que Winkelhock sea piloto oficial únicamente en el Gran Premio de Alemania, que se celebrará el próximo día 21 de julio. La verdad es que no se podrá esperar mucho de él, viendo el rendimiento de los coches holandeses durante esta temporada. Ya puede hacer un milagro para no quedar de último o penúltimo. Más bien creo que debería darse con un canto en los dientes si acaba la carrera sin llevarse una manguera enchufada en el agujero por donde se mete. (Huy qué mal ha sonado eso)

Y Ferrari sigue machacando

Estos tres últimos días han sido muy activos en el circuito belga de Spa-Francorchamps. Las cronos privadas que aquí se realizan son una gran oportunidad para que las escuderías testeen nuevos componentes y mejoras en sus monoplazas, en un circuito tan exigente.

Aquí, en la línea de los dos anteriores Grandes Premios, los dos Ferrari volvieron a dar una lección de velocidad a los demás pilotos. Y es que Massa fue primero los dos primeros días, en los que sólo se encontraba él representando a la marca italiana. Al tercer día un animadísimo Kimi Raikkonen batía el récord nada más llegar en 69 vueltas que recorrió, tras él quedó Kubica, y después el McLaren de Alonso.

Y justo después de que Kimi ganara en Francia y Gran Bretaña, comienzan los halagos. Antes de ello, en el Marca ya no sólo aparecían los amigos Lewis Hamilton y Fernando Alonso, no, un chico nuevo había llegado a la ciudad. Ahora el bisubcampeón del mundo finés existía y era una amenaza. Antes de estos dos últimos Grandes Premios, allá por las lejanas tierras de Norteamérica, Kimi Raikkonen era un hombre acabado, sin posibilidades de conseguir el título. Pero la gente suele vender la piel antes de cazar al oso. En la tercera carrera, cuando los cuatro pilotos iban completamente igualados, decían que éste mundial se iba a decidir en Interlagos. Yo casi estoy seguro de ello.

Aquí la cuestión es no tanto de las victorias como de las pifias. Quien abandone una carrera recibirá un palo demasiado grande para seguir con la lucha por el mundial, y por desgracia el amigo Raikkonen, pese a ser un demostrado piloto frío y calculador es un poco propenso a los accidentes.

jueves, 12 de julio de 2007

El desespero de Vallés, y la "gran afición" española

Desde el despido de cierto piloto holandés anteriormente citado, han corrido ríos de tinta sobre sus posibles sustitutos. Se ha hablado de Christian Klien, compatriota suyo, de Robert Doornbos, también neerlandés, de Karthikeyan, el peligroso y temerario hindú que sirvió en las filas de Jordan hace tres temporadas y de cuyo nombre de pila no me acuerdo... se han barajado cientos de posibilidades, a cada cual más descabellada. Sin embargo, parece ser que Spyker se ha olvidado por completo del también español piloto de pruebas Adrián Vallés. Parece que al pobre le han cogido ojeriza los holandeses. Ya en un Gran Premio de esta temporada no le dejaron subirse a un monoplaza como tercer piloto porque la escudería tramitó con retraso la obtención de la superlicencia, qué curioso... ahora nadie del puente de mando quiere poner como piloto oficial a Adrián. A lo mejor les da mal fario que en el equipo convivan dos Adrianes (Vallés y Sutil). Sea cual sea la razón, sin duda la de más peso será la de siempre en este tipo de equipos, en el que los pilotos entran a golpe de talonario, y el amigo Adrián va de bueno por la vida, escalando desde la GP2. Pero me da que se ha equivocado de lugar este valenciano. Para pilotos promesa están Renault, McLaren, BMW... Spyker no es una escudería para pilotos talentosos (ni ingenieros talentosos, ni directores técnicos talentosos, ni mecánicos talentosos). Spyker es una escudería para hijos de millonarios holandeses (Albers, Klien, Doornbos...) que se aburren y que un día de resaca deciden que se quieren jugar la vida corriendo a 300 en un circuíto de carreras.

Por otro lado quería comentar algo sobre la afición española. Fernando Alonso dice en un anuncio del Banco Santander: "Admitámoslo, hace años nadie habría dicho que la Formula 1 llegaría a ser lo que es hoy". Yo corregiría ésa frase, cambiándola por "Admitámoslo, hace años nadie habría dicho que un piloto español iba a ser bicampeón de la Formula 1". Y es cierto. La gran mayoría de los españoles tiende a seguir un deporte únicamente cuando tiene una buena liga, un buen equipo, una buena selección, o, como es el caso, un buen piloto en las líneas nacionales.

Antes de que la selección española de baloncesto ganara el mundial en el 2006, ni dios veía los partidos que dicha selección jugaba. Pero en el 2006 el equipo pasa a cuartos de final y la gente se empieza a emocionar, y la audiencia de La Sexta empieza a aumentar por el seguimiento de los partidos. Llegan a la final, ganan, y cientos de miles de personas celebran la victoria en la plaza de Colón en Madrid. Lo mismo pasa con el asturiano de la F1. Antes, cuando no existía el amigo Fernando, ni dios veía las carreras por la televisión. Precisamente Telecinco comenzó su emisión de la Formula 1 cuando Alonso debutó en Renault. Podría seguir dando ejemplos, como Rafa Nadal, o Dani Pedrosa, o el debate sobre el estado de la Nación

Con esto quiero llegar a que la gran mayoría de los españoles sólo siguen un deporte cuando hay victorias, si no, no les vale. Seguramente cuando Alonso se largue, esos fanáticos aficionados que durante el Gran Premio de España pueblan la grada N (y de paso sea dicho que están ahí para cualquier otra cosa que para ver una carrera, como dormir la siesta, montar un escándalo infernal o emborracharse) preferirán ir a misa ese domingo. Únicamente los verdaderos aficionados a la Formula 1, los que se tragaban las carreras y las veían en TVE antes del 2003, cuando Fernandito estaba en Minardi, los que seguían las luchas entre Prost y Senna, los que vieron más de cuatro veces cómo Michael Schumacher ganaba el mundial, sólo ésos volverán a disfrutar de la Formula 1 como era antes, sin masas azules con vapores etílicos, ni los polideportivos de Oviedo repletos cada fin de semana, y sin tener que oír en cada salida "Y ya lo saben, si parpadean, se lo van a perder, porque esto es la Formula 1 en estado puro".